domingo, 24 de febrero de 2013

Nim y la ciencia

Nim nació en Oklahoma a principio de los años 70. Cuando contaba con sólo dos semanas de vida, fue arrancado de los brazos de su madre y fue llevado a vivir con una familia neoyorquina. Con ellos pasó cinco años y fue educado como un miembro más en una típica familia del Upper East Side. Es más, fue el centro de esa familia. No le faltó nunca nada y empezó a aprender el lenguaje de signos. Pero al cabo de ese tiempo, Nim empezó a mostrar signos de agresividad. Entonces volvió a ser llevado al lugar dónde había nacido. En Oklahoma, Nim fue incapaz de adapatarse a su nuevo hogar y fue llevado a otro centro de acogida. Al cabo de un tiempo, dicho centro fue clausurado por maltrato. Nim volvió a cambiar de hogar y fue a parar a un centro de acogida. Allí murió a los 27 años por un ataque al corazón. Nim era un chimpancé. Los chimpancés no son humanos. A Nim se le trató como a un humano y tuvo una vida triste. En nombre de la ciencia. La película "El proyecto Nim" cuenta su historia. La recomiendo encarecidamente.
Todo empezó cuando el profesor Herbert S. Terrace, que trabajaba en el departamento de psicología  de la Universidad de Columbia, Nueva York, se planteó que los primates podrían enseñarnos cosas sobre la evolución del lenguaje. Planteó un experimento que consistiría en intentar enseñarle el lenguaje de signos a un chimpancé y ver si éste se podía comunicar con los humanos. El profesor Terrace se puso en marcha: buscó un chimpancé, buscó una familia para el chimpancé y buscó unos profesores de lenguaje de signos. Y así es como Nim, en los años 70, se convirtió en el chimpancé más famoso del mundo. También en el más desdichado.
Pero hubo un momento que el profesor Terrace tuvo bastantes datos para analizar y aludiendo a  la creciente agresividad de Nim,  decidió apartarlo de su familia de acogida neoyorquina y devolverlo a Oklahoma. Resultó imposible insertarlo de nuevo: Nim había pasado tanto tiempo viviendo como un humano, que no pudo volver a ser un chimpancé más. Empezó ahí el tortuoso peregrinaje de Nim en busca de un nuevo centro dónde pudiera vivir.  Uno de esos centros era  de experimentación animal. En nombre de la ciencia se han cometido y se cometen muchas atrocidades. Eso es algo que tiene en común con la religión, por mucho que nos pese.  Y el maltrato de animales usados para experimentación es una de estas atrocidades.
Ya sabemos que Nim murió. Pero, ¿qué hay del experimento del profesor Terrace? Este concluyó que, a pesar que Nim había aprendido el lenguaje de signos y parecía poder comunicarse con sus maestros,  no había evidencias para pensar que los chimpancés pudieran construir estructuras gramaticales como los humanos. Estos resultados fueron publicados en la revista Science. El profesor Terrace, además, escribió un libro y adquirió notoriedad mediática. Nim fue olvidado. Hasta que se ha hecho este documental sobre su tormentosa vida. Un relato duro pero necesario a partir del cual me vienen varias ideas a la cabeza: 1, la innecesaria humanización de los animales (los chimpancés y nosotros compartimos más del 95% de nuestro material genético, pero a pesar de ello, los chimpancés no tiene por qué vestirse ni ir a hacer sus necesidades al retrete); 2,  la poca ética de aquellos experimentos científicos que hacen sufrir de manera innecesaria a los animales; 3, otras reflexiones que se os vengan a la cabeza cuando lo veáis.
Antes de acabar: en España hay granjas de cría de primates. Una de ellas está en Camarles (Tarragona), donde se crían macacos que se venden para experimentar con ellos. Así se refería  Jane Goodal a los simios en su reciente visita al Cosmocaixa de Madrid: "Compartimos tantas cosas con ellos, un ADN y una estructura del cerebro similar. Pero no somos capaces de ver que sufren, que tienen miedo, se estresan y se deprimen igual que nosotros". Cierto Jane, pero aún así, no son humanos. Solamente necesitan que les tratemos como animales y respetemos que vivan como tal. ¿Cuántos Nims más habrán habido?







4 comentarios:

  1. está claro que la historia de NIm es muy triste, y que no mejora en nada nuestra vida saber si se puede "humanizar"a los primates.Pero la investigación con animales es necesaria cuando hablamos de fármacos, vacunas......y aunque nos puede dar pena que se "prueben" medicamentos en ratones, cerdos etc, se salvan muchas vidas gracias a ellos.(raquel cámara)

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  2. Raquel, antes que nada gracias por el comentario! Estoy de acuerdo contigo hasta cierto punto: en ciencia la experimentación es necesaria, pero se debe evitar el sufrimiento innecesario de animales. Aún sin necesidad de humanizarlos, se deberían respetar lo máximo posible las condiciones en que viven dichos animales. Además, una gran cantidad de marcas, sobretodo de cosméticos, testan sus productos con animales. Aquí tienes una lista: http://www.peta.org/living/beauty-and-personal-care/companies/search.aspx?Testing=1&Range=0
    Creo que los consumidores debemos ser conscientes de ello antes de elgir un producto.

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  3. Comparteixo de dalt a baix el teu escrit.
    No he estat capaç de veure el vídeo...
    Gràcies

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  4. Pobre Nim! Leyendo tu texto me da por reflexioanr en mi vida, que a mi aveces me pasa que a picnic, lo trato más como una persona que ocmo un perro... pero bueno la diferencia es que lo mio no es un experimento

    Estoy de acuerdo en tu respuesta de que a veces abusamos de probar cosas en animales cuando mcuhas veces se pueden hacer otros procesos, sino creo que es algo que deberíamos investigar para poder cambiarlo.

    SIgue escribiendo y haciendos pensar en cosas que si no te hablan de ellas te pasan por desapercibidas.

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