Parece ser que una de las exposiciones del año en Barcelona va a ser Génesis de Sebastiao Salgado, que se inauguró hace unas semanas en el CaixaForum. El fotógrafo brasileño se ha recorrido el planeta de punta a punta y se ha traído unas fotos espectaculares de lugares, todavía vírgenes, que posiblemente ni tú ni yo visitaremos nunca. Por ello vale la pena. Fotos bien hechas de sitios espectaculares. Una muestra rica por su calidad y por su cantidad. De fotos, y de gente: por eso decía que va a ser una de las exposiciones del año. Es lo que tiene ser un fotógrafo mainstream, que genera unas colas que mejor ármate de paciencia antes de ir al museo.
Mientras tanto, en la sala de al lado, pocos se han percatado que hay expuesta una obra de uno de los artistas más estimulantes del momento: Olafur Eliasson. Sí, el mismo al que se le ocurrió meter un sol gigante en el vestíbulo de la Tate Modern o el mismo que acaba de instalar unos casquetes de hielo que se derriten frente al Ayuntamiento de Copenhague. Y es que Eliasson es uno de los creadores contemporáneos que ha abrazado a la ciencia y a la tecnología para desarrollar una nuevo discurso con el que reflexionar sobre nuestro mundo en una época que ya se la conoce con el nombre de Antropoceno debido a los cambios, muchos de ellos posiblemente ya irreversibles según el último estudio del IPCC, que la especie humana ha causado sobre la Tierra.
La obra a la que me refiero, esa que está en la sala de al lado de la concurrida Génesis, es Your position surrounded and your surrondigs positioned, que aunque puede que no sea tan espectacular como el sol de la Tate (The weather project) o los casquetes de hielo de Copenhague (Ice Watch), vale la pena por la inquietud que genera y las preguntas que logra plantearte. Como toda obra de arte, y a pesar de no ser un lienzo o una escultura, consigue entablar un diálogo contigo y hace que verdaderamente te posiciones frente a ella, y no sólo en sentido metafórico: existe una interacción física entre el tú y ella, como si de un juego se tratase. No os desvelaré mucho más; prefiero que exista el factor sorpresa cuando la visitéis. Y que cada uno la interprete como se le ocurra.
A pesar de que Salgado y Eliasson son artistas con una misma sensibilidad hacia la problemática medioambiental tan grave a la que por cierto asistimos como si con nosotros no fuera la cosa, diría que visitar la muestra de Salgado está bien porque Salgado es Salgado, pero descubrir un nuevo artista y una manera diferente de hacer arte es, a mi entender, mucho más estimulante y satisfactorio. Y es que ya se sabe, para gustos, los artistas.
*La obra de Olafur Eliasson se encuentra dentro de la muestra "Tres Narrativas. Participación" y se puede visitar hasta el 15 de Febrero.